NACIONAL. Edgardo Avilez

Estimados es una lástima confirmar la sensible noticia sobre el fallecimiento del piloto peruano Edgardo Avilez. A continuación reproduzco la información publicada en el diario la Estrella de Arica. Cabe resaltar que el periodista que encontró esta información es Hans Firbas a quién le agradecemos por referirnos la versión de la prensa chilena.

En horas de la tarde de ayer se realizó un simbólico velatorio en honor a Edgardo Avilez Puertas, piloto y dirigente del automovilismo en Arica, quien se suicidara la madrugada del viernes pasado mediante un disparo de pistola en la sien en el living de su casa, ubicada en el pasaje Marsella de la Villa Pedro Lagos. La ceremonia se efectuó en el taller Team Avilez, de propiedad del infortunado piloto, y contó con la presencia de decenas de familiares, amigos y compañeros del mundo de las carreras.

"Yunta de mi brother"
Pablo Cornejo es miembro del Team Avilez desde el año 2001 y ayer en la ceremonia religiosa quiso dedicarle unas palabras a quien consideraba su "yunta".
Mencionó que más de alguna vez lo había acompañado a Lima. "Allí conocí a sus hermanos, su mamá. También tuve la oportunidad de correr varias veces con él", precisó.
"A él le encantaban los fierros y quería siempre ser el campeón. Su manejo todos los conocían, nos contaba los secretos de esto", contó.
- ¿Por qué cree que se suicidó?
- Es que mi compadre era súper cerrado, introvertido. Si había que llorar no iba a llorar.

Fanático del aseo
Eduardo Urrutia, otro miembro del team, es uno de los que lo conocía hace más tiempo, desde el año 95 específicamente. "Un día corrimos los dos en la calle, cuando las carreras se hacían allí, y me ganó. Ahí nos hicimos amigos", relató. Según él, su compañero en las pistas será recordado como "un buen amigo, orgulloso y llevado de sus ideas".
- ¿Cómo manifestaba eso?
- Es que es difícil explicar como era. A veces era súper alegre pero cuando las cosas no salían como él quería le daba la idiotez.
En otro ámbito de su personalidad, sus amigos destacaron su gusto por el aseo.
"Su primera pasión eran los autos y la segunda era la escoba. Vivía limpiando, hacía lavar las herramientas cada vez que las ocupaban, se enojaba cuando botaban las colillas al suelo", recordó Pablo Cornejo. Otro que estuvo presente ayer fue Pierre Lombardi, quien le había comprado su auto a Edgardo Avilez el año pasado. "Ahora tienes que ser campeón", le espetó uno de los presentes.

A lima
El cuerpo de Edgardo Avilez será recién entregado a sus familiares mañana lunes a las 9 de la mañana. Esto es debido a que la intención de la familia, representados por sus hermanos Bernardo y Javier, quienes viajaron especialmente de Lima, es llevarse los restos a la capital peruana. Y los trámites y certificados de aduana sólo se realizan de lunes a viernes.
En Lima el cuerpo será cremado y luego una parte de sus cenizas volverá a Arica, donde se ubicarán en el autódromo. Aún no es seguro pero una de las posibilidades que se mencionó es esparcirlas en el recinto deportivo.

Homenaje esta tarde
A partir de las 14 horas de hoy los simpatizantes y miembros de distintos teams de corredores del autódromo de Arica se darán cita en dicho lugar para brindarle otro homenaje.
En la pista habrá piques de velocidad, pero antes se pasará un data show con imágenes de Avilez. Habrá palabras de dirigentes de la Asociación de piques 1/4 de milla y se colocarán recuerdos de su persona en la pista donde solía correr.

Llegó en 1992
Edgardo Avilez Puertas, 34 años, había llegado a nuestra ciudad desde Lima el año 1992 por motivos de estudios. Ese año entró a estudiar mecánica automotriz a Inacap. Luego se dedicó por allá por el año 96 al llamado "deporte tuerca", disciplina en la que destacó tanto en Chile como en su tierra natal. Entre sus logros destacan dos segundos lugares consecutivos el 97 y el 98 en el torneo Turismo Superior Las Palmas, Perú; tercero en la competencia de Tacna en 1990, tercero en Miraflores el 2000; campeón en Collique el 2002, entre otros. El año pasado se había coronado campeón de la categoría light del automovilismo ariqueño.

Retiro
A fines de ese mismo año había decidido retirarse de la actividad que le brindara tantas satisfacciones, por motivos familiares: los viajes a competir le demandaban demasiado tiempo. Avilez tenía dos hijos: Edgardo , de 4 años, y Josefina, de 7. Eran de distintas parejas. Antes de dispararse en la sien, el piloto y dirigente dejó una carta dirigida a sus familiares. Allí explicaría que las razones de su determinación eran porque no soportaba la separación con su pareja.